Oklahoma sobrevive a la rebelión de los Pelicans

Los Thunder sudaron mucho más de lo esperado ante New Orleans Pelicans (94-92). Siendo primeros de la Conferencia Oeste y conociendo la baja de Zion Williamson para toda la serie, Oklahoma City apuntaba (y apunta) a claro favorito para pasar de ronda; sin embargo, el primer combate dejó claro que los de Luisiana no van a dar facilidad alguna.vos

En un choque tremendamente igualado de principio a fin –OKC sólo logró una renta de 10 puntos por un instante– todo terminó decidiéndose en los últimos instantes. A falta de tres minutos y medio para el final Brandon Ingram colocaba dos puntos arriba a los suyos. La grada local veía cerca el desastre, pero justo ahí, cuando más falta hacía, surgió todo el talento de Shai Gilgeous-Alexander para lograr cinco puntos consecutivos y poner en cabeza a los Thunder. Sí, el finalista al premio MVP del curso les dio aire, pero el suspiro de alivio definitivo llegó cuando C.J. McCollum erró un triple en el último segundo. 1-0 para Oklahoma.

«Creo que mostramos mucha determinación en la recta final. Obviamente, fue un partido reñido. Ofensivamente fue una especie de lucha constante para ambos equipos. Hicimos buenas jugadas defensivas en la recta final, jugadas importantes, y tuvimos la determinación de entrar y ganar el partido», señala Mark Daigneault, head coach de OKC.

En el apartado individual, y como era esperado por todos, brilló por encima del resto Shai Gilgeous-Alexander. El jugador franquicia de los Thunder se marchó hasta los 28 puntos, 6 rebotes y 4 asistencias. Y no estuvo solo, ya que Chet Holmgren le acompañó con un doble-doble de 15 puntos y 11 rebotes, mientras que Jalen Williams aportó otros 19 tantos.

Mientras para Oklahoma el partido se convirtió en una carrera por evitar el desastre, para New Orleans supuso la confirmación de que están listos para plantar batalla. No cuentan con Zion, pero en su ausencia brillaron otros como Trey Murphy III con 21 puntos o Jonas Valanciunas con un doble-doble de 13 puntos y 20 rebotes. Sí, estuvieron en la pelea y Willie Green no puede sino elogiar tal esfuerzo de sus chicos.

«Tuvimos tiros en buenas posiciones durante la recta final que simplemente no acertamos, así que todo se redujo a la última jugada. Nuestros muchachos pelearon toda la noche. La defensa fue sólida. El plan de juego se ejecutó a un alto nivel. Simplemente tenemos que acertar algunos tiros», sentencia el entrenador de NOLA.

(Fotografía de Cooper Neill/Getty Images)


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