Los Orlando Magic presentan una de las mejores rachas en activo de victorias después de imponerse en los últimos días a los Boston Celtics en dos ocasiones. Estos seis triunfos consecutivos han permitido que la franquicia abandone el pozo de la Conferencia Este pero no han sido suficientes para ganarse el respeto del entorno general de la liga.
Después de la primera victoria ante los Celtics, el antiguo jugador de los verdes, Eddie House, calificó a los Magic como «basura» y afirmó que «todavía están lejos de ser un buen equipo de baloncesto» en un programa de NBC Sports Boston. Estas palabras no pasaron desapercibidas en el seno de la plantilla de Florida, quienes devolvieron la cachetada con otro triunfo ante Boston.
Tras el encuentro de este domingo, Paolo Banchero, gran protagonista del duelo con 31 puntos, compartió su orgullo por la victoria y recalcó que palabras como las de House les sirven como motivación para ofrecer la mejor versión de sí mismos. «Mentiría si dijera que no lo vimos [el vídeo de House]. Encendió el fuego de los muchachos y del equipo en general. Está claro que mucha gente todavía no nos respeta, así que tendremos que salir a darlo todo en cada partido y asegurarnos que así sea. Y, finalmente, se ganará.»
El número uno del draft de 2022 mostró también el aplomo de un veterano al reconocer que una crítica así era la chispa que necesitaban para evitar ser complacientes tras la anterior victoria conseguida. «Lo usamos como combustible. Fue una motivación instantánea. Era justo lo que necesitábamos ver. Después de ganarles y saber que vuelves a jugar contra ellos, a veces puedes quedarte satisfecho con esa primera victoria. Pero ver ese vídeo nos dio ese impulso adicional en el segundo partido. Y decidimos repetirlo», añadió el novato.
A pesar de contar con un récord de 11-17, los Magic han demostrado un juego muy vistoso y resolutivo que los sitúa un peldaño por encima del resto de equipos que, actualmente, ocupan la zona baja de ambas conferencias. Por su parte, Banchero continúa viento en popa hacia el premio al Rookie del Año gracias a unos promedios de 22,0 puntos, 6,8 rebotes y 3,9 asistencias.
(Fotografía de portada de Brian Fluharty/Getty Images)