Las alarmas se repiten en diversas ciudades de la geografía norteamericana. Ya sea por lesión o por el protocolo de seguridad debido al COVID-19. Uno de los últimos en caer ha sido Russell Westbrook, quien se perderá, al menos, una semana de competición por una lesión en el cuádriceps izquierdo, según ha anunciado la propia franquicia.
Esta lesión ha sido causada por el contacto reiterado en el área afectada. El base, que también está lidiando con un dedo dislocado, ha promediado 19,3 puntos, 9,7 rebotes y 11,3 asistencias en sus siete partidos con la camiseta de los de Washington.
Esta ausencia supone el último golpe al ya decepcionante inicio de temporada de los Wizards. Los capitalinos ocupan la última posición de la Conferencia Este con un balance de 2-8 y recientemente han recibido la noticia de la baja para todo el curso de Thomas Bryant tras sufrir un desgarro del ligamento cruzado anterior de su rodilla izquierda. Una ausencia que, de momento, intentarán solventar como bien puedan mediante una disabled player option de 4,2 millones, según ha informado el periodista Adrian Wojnarowski.
Ahora, todo el peso del equipo recaerá, una vez más, sobre los hombros de un Bradley Beal cuyas exhibiciones anotadoras no logran transformarse en victorias. El escolta está promediando 35 puntos por encuentro y su futuro vuelve a ser incierto. Ya durante el pasado curso varios rumores lo situaron lejos de la franquicia.
A pesar de que ha insistido reiteradamente en su deseo de acabar su temporada en Washington, el pasado mes de noviembre ya envió un pequeño recado a la organización. “Firmé mi contrato y lo estructuré de una manera que nos permitiera tener cierta flexibilidad financiera, pero al final del día, solo quiero ganar. Y la franquicia tiene que demostrarme que queremos conseguirlo”, dijo al podcast de J.J. Redick.
La llegada de Westbrook apuntaba a calmar las aguas y tranquilizar a su estrella, pero los Wizards no han respondido a las expectativas. Y el propio Beal ya explotó hace unas semanas, mostrando su cabreo por la racha de derrotas sufrida durante estas primeras semanas. ¿Cómo acabará todo esto?
(Fotografía de portada de Maddie Meyer/Getty Images)