Los Knicks de Nueva York abrieron la jornada matinal del domingo con su tercera victoria consecutiva en el Madison Square Garden al imponerse a los Charlotte Hornets por un cómodo 107 a 129.
El canadiense R.J. Barrett comandó la ofensiva de los Knickerbockers con 24 puntos y 4 rebotes mediante un 9/16 en tiros de campo; secundado por Julius Randle con 23 tantos, 5 rebotes, 5 asistencias y 3 robos de balón; y por Jalen Brunson, que concluyó con 20 puntos.
«Simplemente hemos jugado duro desde el salto inicial», reconoció R.J. Barrett al medio ESPN. «Estaban justos de efectivos, y era un partido que empezaba a las doce del medio día. Y cuando en estos partidos sales bien desde el principio, normalmente los ganas», destacó.
Los Knicks iniciarán el lunes una gira en Boston de cinco partidos consecutivos en la carretera tras las tres victorias seguidas obtenidas en su pabellón ante Clippers, Spurs y Hornets que les colocan con un registro positivo de 5-4.
El conjunto neoyorquino no tuvo rival, y salvo cierta paridad en el primer periodo (+7 para ellos), jugaron a placer el resto de la mañana con una ventaja de al menos dobles dígitos en el marcador durante los últimos 29 minutos, incluido un último cuarto que podríamos calificarlo como «el de la basura».
«La verdad es que estamos jugando un buen baloncesto ahora mismo», admitió Julius Randle. «Pero todavía es pronto. Tenemos que seguir trabajando para llegar hasta donde queremos», agregó.
Malas noticias para los Hornets que, además de una nueva derrota, perdieron por lesión a su novato Brandon Miller con apenas 10 minutos de juego cuando tuvo que retirarse en el segundo cuarto después de sufrir una torcedura de tobillo.
LaMelo Ball fue el más destacado de los visitantes con 32 puntos, 7 rebotes y 6 asistencias; secundado por el pívot reserva Nick Richards con 16 tantos y 4 rebotes en apenas 22 minutos de juego.
También aportaron dobles dígitos anotadores en el encuentro Immanuel Quickley y Mitchell Robinson con 17 y 10 tantos respectivamente; y en los Hornets los titulares Miller y Mark Williams obtuvieron 11 y 10 respectivamente.
«Tuvimos varios muchachos que jugaron de una forma muy desinteresada, y luego pudimos pararles en defensa. Eso nos brindó algunas oportunidades fáciles, y las aprovechamos», concluyó Tom Thibodeau.
(Fotografía de portada: Elsa/Getty Images)