No vamos a descubrir ahora a Damian Lillard. El veterano base es por méritos propios uno de los mejores jugadores del siglo XXI en la NBA. Sin embargo, tal consideración no sirvió de mucho cuando un flojo comienzo de campaña con los Bucks hizo que las críticas volasen en su contra. Sí, en cuestión de un par de semanas pasó de que le viesen como un encaje perfecto para Giannis Antetokounmpo a ser señalado como apuesta fallida. Los tiros no entraban, el equipo no convencía, se terminó despidiendo al entrenador… Parecía imposible que la receta acabase bien, pero para alegría de los aficionados de Milwaukee, las cosas han cambiado.
Ya con Doc Rivers en el banquillo, los de Wisconsin han empezado a carburar hasta recuperar la segunda plaza de la Conferencia Este gracias a una racha de seis victorias consecutivas a la que anoche pusieron la guinda. Jugando en casa y recibiendo a unos potentes Clippers –y sin contar con Giannis Antetokounmpo–, los Bucks se impusieron por 113-106 gracias a un Damian Lillard que fue por mucho el mejor jugador sobre el parqué al irse hasta los 41 puntos. Simplemente disfruten.
«Nadie habló antes del partido sobre las ausencias. Estábamos en el vestuario y Doc no entró y dijo: ‘Está bien, Giannis está fuera’. Khris está fuera’. Simplemente entramos, conversamos sobre el informe del rival y lo que teníamos que hacer para ganar el partido. Eso fue todo. Creo que eso muestra lo que se espera de nosotros, el estándar que estamos empezando a tener y en quién nos estamos convirtiendo como equipo», avisa Lillard.
Lo cierto es que fue un partido muy complicado para unos Bucks que estuvieron por detrás durante muchos minutos; tanto es así que a poco antes de comenzar el último periodo aún estaban 13 puntos abajo. No se rindieron. Ya en el último periodo firmaron un parcial de 14-0 con el que dieron la vuelta al marcador antes de certificar la victoria.
Más allá de la espectacular actuación del base All-Star, los Bucks contaron también con una gran aportación de Bobby Portis, quien desde el banquillo firmó un doble-doble de 28 puntos y 16 rebotes.
Hundidos por la zona
Tras tres cuartos dominando, los Clippers cayeron en la trampa defensiva de Milwaukee, que colocando una zona desactivó por completo el ataque de los californianos. Cuestionado por ello, el entrenador de los angelinos, Tyronn Lue, señaló que se equivocaron a la hora de hacer frente a tal sistema
«Cuando fueron a esa zona, creo que nos centramos demasiado en el tiro en suspensión en lugar de seguir atacando la canasta y entrar en la pintura. Creo que estábamos en bonus para ir a la línea de personal. Hicieron un buen trabajo cambiando a la zona y no supimos responder», admite el técnico.
(Fotografía de Tim Nwachukwu/Getty Images)