La estrella de Chicago Bulls, Zach LaVine, ha cumplido los protocolos sanitarios a los que lleva expuesto desde el pasado 14 de abril. En este tramo de veinte días el escolta se ha perdido once encuentros en los que su equipo ha tenido un balance de 4-7. Estos resultados han alejado a Chicago de la décima plaza que ocupaba al comienzo de la baja de LaVine. A siete partidos del final de la temporada se encuentran a cuatro encuentros de Washington Wizards, equipo que ocupa la última plaza que da acceso al play-in en el Este.
El jugador volverá el jueves para enfrentarse a los Hornets e intentar ayudar al grupo en un sprint final obligatorio. Sin embargo, dada la prolongación de su ausencia, podría no regresar a un nivel óptimo. LaVine ha estado fuera de ritmo de juego al menos una semana más de lo usual en casos relacionados con COVID-19. Aunque esté preparado para volver a jugar, no sería la primera vez que el rendimiento de un jugador se ve afectado tras haber sufrido percances derivados del virus. Se desconoce hasta qué punto ha sido comprometida su salud durante las últimas semanas, pero no sería conveniente esperar una vuelta en plenitud de facultades.
(Fotografía de portada de Jonathan Daniel/Getty Images)