Mucho respeto, excesivo casi, el que estaba habiendo entre Warriors y Cavaliers en los prolegómenos de estas Finales de la NBA. Dos equipos que no se han querido mucho en las dos últimas temporadas, desembocaban en un duelo final edulcorado en protocolo.
«Somos unos Cavs mejores y unos Warriors mejores», decía hace unos días LeBron James. Alguien de su plantilla, no se sabe quién, discrepa mínimamente. O al menos no piensa que en Oakland sean mejores gracias a todas sus nuevas incorporaciones. Hay uno que no sólo no suma, sino que resta. Si es que llegara a jugar, claro; algo de lo que el susodicho, parapetado en el anonimato, duda.
En el podcast ‘The Basketball Analogy Show’, tuvo lugar un debate sobre el impacto que ha tenido JaVale McGee durante su primera campaña con la camiseta de los Warriors.
¿Limitado o estigmatizado?
Dave McMenamin, miembro de ESPN y corresponsal en Cleveland, era uno de los tertulianos. «Conozco a un jugador de los Cavs que no estaría de acuerdo contigo, Brian», le decía McMenami a Brian Windhorst, el conductor del programa. «Me han insinuado que él ni siquiera piensa que McGee vaya a pisar la cancha, o siquiera estar en el banquillo, porque no piensa que sea lo suficientemente inteligente para poder jugar en esta serie».
McGee fue la última pieza que Steve Kerr decidió sumar a su plantilla cuando varios se disputaban el puesto. Shaqtin’ a Fool y una carrera irregular eran sus principales escollos; Andre Iguodala, su mejor valedor. Y durante el año, JaVale se ha ganado a todos.
Los datos hablan
Con minutos limitados, el pívot ha logrado tener un gran impacto casi a cada ocasión que el coach le ha sacado a pista. Sacando enorme provecho de su mejor virtud, la de dominar por encima del aro, se ha atiborrado a puntos gracias a la excelente colaboración de facilitadores de lujo como Draymond Green o Stephen Curry, siempre dispuestos a buscarle en el alley-oop.
Una versión no tan perfeccionada de Chris Paul y de Andre Jordan en Lob City, pero casi igual de eficaz. Durante la temporada regular, McGee ha jugado 77 partidos (10 de titular), y en apenas 9,6 minutos ha logrado promediar 6,1 puntos, 3,2 rebotes y casi un tapón.
En postemporada, Kerr y Brown le han dado una chispa más de confianza: 12 encuentros a razón de 10,5 minutos, a los que el center ha respondido con 7.0 puntos y 1,1 tapones. Recordemos incluso su partido con mayor desparpajo: en su única titularidad de la postemporada sustituyendo a un lesionado Pachulia, le endosó 16 puntos a los Spurs, anotando 13 en el primer cuarto.
Finales empíricas
Iggy decía esto: «JaVale es mucho mejor jugador que aquellos chicos que este pasado año han conseguido un gran salario. Como ya he dicho, mucho mejor”. Mientras, un jugador del seno de los Cavs, a pesar de lo oído y visto, se mantiene en en sus trece, pensando lo contrario.
A pesar de estos recelos y dudas respecto de ver a McGee en pista en las Finales, lo más probable es que los 2,13 metros del ‘5’ vean bastantes minutos en esta oportunidad única; y ahí, entonces, lo sucedido dará a uno u otro la mayor parte de razón.