Su participación en el primer partido ante los Lakers parece improbable, ya que no podrá entrenar con sus compañeros antes del encuentro
Las idas y venidas siguen sucediéndose en Los Angeles Clippers. La franquicia californiana, una de las favoritas al anillo, está viendo como sus primeras semanas en la burbuja de Orlando –está pensada justo para no salir de ella– se han convertido en una especie de control de aeropuerto. Entre los jugadores que la han abandonado por motivos familiares, los que han llegado más tarde por atender asuntos personales y los que han tenido que esperar por haber dado positivo semanas antes, en los Clippers han atendido siete casos diferentes.
Por suerte para ellos, al menos ahora ya tienen al grueso de su plantilla en Disney World. La última reincorporación en producirse ha sido la de Patrick Beverley. El base hubo de marchar el 22 de julio por una emergencia familiar sin determinar. Según informa Adrian Wojnarowski de ESPN, ya está de vuelta para cumplir con la pertinente cuarentena antes de ponerse a las órdenes de Doc Rivers.
La vuelta de Beverley hace que Montrelz Harrel sea el único clipper que permanece fuera de la burbuja. Recientemente ingresó a la sede del final de la temporada Landry Shamet, quien había dado positivo por coronavirus en Los Ángeles, así como Ivica Zubac y Marcus Morris. Lo que no está claros es con quienes de ellos contará Rivers para la jornada inaugural del 30 de julio. En el caso particular de Beverley, parece complicado que esté en el encuentro inaugural ante los Lakers, ya que debería pasar antes el periodo de cuarentena, llegaría al partido sin entrenar previamente con sus compañeros.
El caso Williams
Esto sí ha sido un importante contratiempo para los Clippers. Al igual que sus compañeros, Lou Williams recibió permiso para abandonar Orlando para atender un asunto personal, en su caso el funeral de un familiar. Sin embargo, coincidiendo con su periodo fuera del recinto acudió igualmente a un ‘strip club’. Es esta especial circunstancia la que ha hecho que la NBA le imponga una cuarentena de 10 días. Dado el poco tiempo que resta para la reanudación del curso, tal impasse supone que Williams se pierda los dos primeros partidos de los Clippers.
(Fotografía de Harry How/Getty Images)