El campamento dentro de las fronteras de la burbuja de Orlando no ha dado con los mejores días de Lonzo Ball como jugador profesional, desde luego.
El base de los New Orleans Pelicans dejaba hasta la jornada de este jueves promedios de 7,1 puntos, 6,6 asistencias, 30,5 por ciento en tiros de campo, 28,1 en triples y 55,6 en tiros libres… Un desastre todavía mayor, si cabe, que el récord de 2-5 perpetrado por su equipo hasta este jueves; y peores cifras que sus 12,4 tantos, 7,0 servicios de canasta, 41,2 por ciento en tiros de campo y 38,3 en triples antes del parón. Vamos, que su rendimiento en Florida fue cuesta abajo.
No hay que crucificar a Lonzo Ball en la plaza mayor por ocho partidos, pero sí que el run run sobre su rendimiento ha comenzado a sonar en New Orleans. A pesar de que Zion Williamson augura un futuro brillante, el periodista David Aldridge (The Athletic) insinuó que se avecinan algunos ajustes en la plantilla de los Pelicans. Y que esos cambios podrían incluir al joven base titular del equipo.
«Gente que está en Orlando me dice que Lonzo Ball parecía como que hubiera estado fuera todo el tiempo que los Pels (Pelicans) estuvieron allí, y que esperan ajustes importantes en la plantilla de New Orleans antes de la nueva temporada».
No deja de ser un rumor pero fuentes de The Athletic insinúan cambios de calado en los Pelicans. Estos podrían empezar con la marcha de un Alvin Gentry cuya prensa se ha dañado después del rendimiento ofrecido por su equipo en la burbuja. Quedará por ver si Lonzo Ball es otro de los sujetos que New Orleans desea canjear en busca de nuevos horizontes.
(Fotografía de portada: Mike Ehrmann/Getty Images)