En julio de 2017, Victor Oladipo fue traspasado a los Pacers como parte del acuerdo que cerraba la incorporación a Oklahoma City de Paul George. En su nuevo destino, el escolta firmó una brillante temporada de debut que le permitió estrenar su condición de All-Star. Su rendimiento fue muy próximo al de un jugador que aspiraba a ser la piedra angular de una franquicia. Y también demostró que valía cada centavo de acuerdo por cuatro años y 84 millones que acababa de firmar.
Tres años después, el panorama es muy distinto. Una rotura del tendón del cuádricepes le mantuvo en el dique seco durante más de doce meses y tan sólo pudo disputar 19 partidos en el presente curso. Cuando daba muestras de su mejor nivel, la suspensión de la temporada a causa del COVID-19 echó por tierra el trabajo previo y durante la burbuja de Orlando no fue capaz de encontrar su ritmo.
Pese a la contundente eliminación en primera ronda a manos de Miami, los Pacers demostraron ser capaces de rendir a un buen nivel sin Oladipo, quien vio desprendida su etiqueta de pieza imprescindible. Y no precisamente en el mejor momento posible. Al dos veces All-Star solo le resta un año de contrato y muchas informaciones sugieren que su estancia en Indiana podría estar llegando a su fin.
Aún así, Oladipo lo tiene claro. Sea cual sea su destino, su deseo es firmar un contrato máximo durante la agencia libre de 2021 y demostrar que puede seguir rindiendo a un alto nivel tras su lesión, según una información procedente de Bleacher Report. Sin embargo, ese mismo deseo de ratificación es el mismo que sugiere que su petición quizá no sea bien recibida entre las franquicias de la liga. Muchos dudan de que pueda recuperar su estado de forma previo. Así, de su rendimiento durante el próximo curso dependerá su nuevo contrato. Y no sobrarán millones si finalmente se confirma un descenso del límite salarial.
Por otro lado, estas expectativas, su único año de contrato restante y su etiqueta como transferible podrían afectar a su valor comercial. Varios medios han sugerido a las ciudades de Los Angeles, Nueva York y Boston como potenciales destinos. Pero es muy probable que ninguno de ellos quiera cerrar un traspaso con los Pacers para después encontrarse con la petición de un contrato máximo por parte del jugador.
Así, el curso 2020-21 se presenta como un punto crítico e importante en la carrera de Victor Oladipo. Y mucho penderá de su capacidad para dejar atrás cualquier tipo de molestia o resquicio de su última grave lesión.
(Fotografía de portada de Kim Klement – Pool/Getty Images)