BILBAO / ENVIADO ESPECIAL
Como los antiguos pueblos escandinavos tomaron por costumbre en las costas del centro de Europa, sus descendientes, en este caso los habitantes de la actual Finlandia, han decidido establecerse, temporalmente, eso sí, en la ciudad de Bilbao.
Y es que el Mundial 2014 ha alterado el mapa político de Europa: desde el pasado viernes hasta el próximo día 4, la provincia de Vizcaya ha adoptado el finés.
En el encuentro inaugural de Finlandia, frente a Estados Unidos, algo más de media entrada —16.200 espectadores es el total— permaneció detentada por aficionados nórdicos. Asimismo, una vez emplazados en su asiento, cada punto y lance fue celebrado con la vehemencia propia de una final internacional.
Así fue ante el Team USA y durante la primera parte del segundo choque del grupo, disputado ante Ucrania.
Desembarco de colorido
Y no solo eso, desde primeras horas de la mañana hasta que la noche vizcaína invita a peregrinar el Casco Viejo de la ciudad, las camisetas y colorido de las hordas finlandeses están presentes en cada rincón.
Se ha calculado que los fans nórdicos cuentan hasta con 7.000 aficionados acogidos por Bilbao y alrededores. Así, se espera que la ciudad vizcaína adopte un nuevo aliado internacional en los próximos días.
Imagen: FIBA.com