Los New York Knicks llevan disputados 46 partidos esta temporada. Los mismos que Julius Randle. El ala-pívot lo ha jugado todo en lo que va campaña, por lo que los knickerbockers se adentran en una nueva dimensión. Una dimensión sin Randle, el único titular del quinteto que no ha faltado a una sola cita y lidera al equipo en minutos sobre el parquet.
Adrian Wojnarowski ha ampliado la información de esta mañana tras conocerse los resultados de la resonancia magnética en su hombro derecho (‘el menos malo’, recordemos que Randle es zurdo). El staff técnico respira aliviado, pues no se han apreciado daños graves que hagan necesaria una intervención quirúrgica, y bastará, a priori, con unas pocas semanas de reposo.
As testing continues on Knicks All-Star F Julius Randle’s right shoulder, indications are optimistic that his absence will be measured in weeks and not months, sources tell ESPN.
— Adrian Wojnarowski (@wojespn) January 29, 2024
Con el All-Star a la vuelta de la esquina (lo que va acompañado de una semana sin liga regular), el número de encuentros que los Knicks deberán afrontar sin su hombre se verá reducido. Aún así, serán unos cuantos. Y ahora corresponderá a Tom Thibodeau decidir cómo repartir su tiempo en pista para mantener la gran dinámica que les permite estar 4º del Este y con cinco partidos de ventaja sobre el play-in.
¿Un mayor peso para Anunoby, con desplazamiento hacia el interior? ¿Quintetos más pequeños con Grimes y Hart? ¿Incremento de rol para el recién llegado Achiuwa, quién está haciéndolo realmente bien en sus pocos ratos? ¿La desmomificación de Evan Fournier?La decisión de Thibodeau–
La tabla de arriba revela otro dato importante más allá de los minutos. Randle es el segundo máximo anotador de su plantilla, con un 24 puntos por partido, sólo por detrás de Jalen Brunson (26,6).
Y no queda ahí, pues el peso del power-forward en la estadística básica es enorme: es segundo en rebotes (9,2) y segundo en asistencias (5), ejerciendo el papel de playmaker interior y siendo Brunson y DeVincenzo sus receptores favoritos para ejecutar (48,7% y 41,7% de acierto exterior respectivamente tras pase de Randle).
Además, un apartado interesante de HoopStats revela que cuando Randle domina a su matchup en cancha, a su par por asignación (jugando ambos >25 minutos), los Knicks tienen la victoria casi asegurada (21-4). Todo lo contrario a cuando es él el dominado (2-11).
Por otro lado, en estadísticas avanzadas ligadas directamente al resultado final, a ganar o perder partidos, Randle sufre. O al menos no brilla con luz propia. Su Win Share es de 4 puntos (el del año pasado fue de 8,1, cercano a la élite), y su net-rating apenas mejora en 0,2 puntos al global de los Knicks.
Decía Escohotado que la libertad es intangible, sólo la sentimos cuando nos la quitan.
Hablar de Julius Randle es referirnos a un doble All-NBA y a un activo de producción generosa en cuanto a números, como acabamos de ver. Y sin embargo, son muchos los aficionados que no terminan de subirse a su carro, sostenidos en la homilía de las calorías vacías. El discurso los jugadores afiliados a un boxscore exultante pero que no logra ser correlativo al valor que aporta al equipo.
Si Draymond Green ha sido durante la última década el rey de los intangibles, Randle, para muchos, sería su antítesis. Ahora que los Knicks van a estar unas pocas semanas sin él, veremos cuánto añoran lo dulce de su azúcar glass.
(Fotografía de portada de Mitchell Leff/Getty Images)