El final del serial de Jimmy Butler lo vivimos ayer sábado, 10 de noviembre de 2018, con el traspaso del jugador a los 76ers, que recibían de Minnesota también a Justin Patton y enviaban a su vez a los Timberwolves a Dario Saric, Robert Covington, Jerryd Bayless y una segunda ronda del Draft de 2022.
Fin de la telenovela, iniciada el 18 de septiembre cuando se supo que Butler había comunicado a la franquicia y a Tom Thibodeau que no deseaba jugar más en Minnesota, que le traspasaran, que no iba a renovar en 2019. Todo aquello, lejos de fructificar en un traspaso rápido, se fue enmarañando, incluido un frenazo de última hora cuando Butler ya estaba hecho por los Heat. Al final, en un ambiente imposible, rodeado de mala atmósfera como estaba el vestuario de los T-Wolves, los rectores del equipo y el propio entrenador, Thibodeau, han tenido que ceder, dejar salir a Butler. Fin de la historia.
Embiid y Simmons, optimistas con la llegada
Butler cambia el Oeste y regresa el Este que bien conoce de sus días en Chicago, de donde salió traspasado hacia Minneapolis en la noche del Draft de 2017. Jugará al lado de dos de los jugadores con más presente y futuro de la liga, Joel Embiid y Ben Simmons, dentro de unos 76ers que con la suma del All-Star aumentan su candidatura al cetro del Este.
Tras conocerse la noticia del fichaje de Butler por Philadelphia, Embiid se puso en contacto con Andrew Wiggins y con Karl-Anthony Towns, hasta este fin de semana compañeros de Butler en Minnesota. «Me dijeron que va a ser bueno para nosotros”, apunta el camerunés, en declaraciones recogidas por ESPN. “Wiggins piensa que vamos a ganar el Este seguro”.
Embiid, que no tiene relación personal con Butler, alejó cualquier posibilidad de sentirse molesto porque la nueva cara le pueda quitar protagonismo. “Quiero ganar. Creo que todo el mundo sabe que soy un competidor y quiero ganar. Si algo es beneficioso para mí y para el equipo, no hay problema. Pero si se trata de algo que no va a ser bueno para la franquicia, entonces no estará bien. Todos saben que digo lo que quiero, lo que sale de mi mente. No tengo problema en hacerlo”, señaló el pívot a ESPN, para después abrazar la llegada de Butler. “Estoy emocionado de tenerle. Podemos construir algo especial. Estoy entusiasmado con salir a jugar con otra persona que tire del carro. Espero que podamos llegar a las Finales y tener opciones de ganar el título”.
Otro All-Star
Por su parte Simmons, además de remarcar la pena que sentía por la marcha de piezas como la de Saric o Covington- “les echaré de menos”- asumió que así son los negocios, la NBA. “Hay que seguir adelante. Les quiero y les deseo suerte. Seguiré en contacto con ellos”.
“Añadimos a otro All-Star”, apuntó el Mejor Novato del Año 2018 sobre la llegada al vestuario sixer de Butler. “Un tipo que puede penetrar, anotar, que tiene liderazgo de veterano, experiencia. Va a encajar ahí. Nuestra cultura es ganar, jugar juntos y duro como equipo. Él va a traer eso».
Sobre si su rol se verá afectado por Butler, Simmons lo deja claro a ESPN, tras la derrota de anoche de Philadephia contra Memphis. “No va a afectar a mi juego. Sé lo que puedo hacer sobre la pista. Él viene a ayudarnos, a añadir otro anotador, otro veterano que puede hacer el juego en la línea correcta. Va a encajar con nosotros. Tenemos la misma mentalidad, amamos ganar”.