Diez días después de que Kyrie Irving decidiera saltarse su comparecencia ante los medios (y con una multa hacia jugador y franquicia de por medio), por fin el base ha roto su silencio. Luego de la victoria de los Nets por 119-115 sobre los Wizards del domingo, Irving atendió a los periodistas ayer lunes.
El jugador intentó suavizar sus palabras ofensivas después de ser multado, explicando que no se refería directamente a los medios de comunicación con su comentario de «peones», sino que estaba haciendo referencia a algo más amplio sobre la protección de su voz y plataforma.
En segundo lugar, quiso mandar un mensaje de apoyo a Steve Nash tras haber declarado hace semanas que no veía un entrenador en jefe en el equipo, sino que según él, Durant podría ser un entrenador en jefe un día o él mismo podría serlo otro día, queriendo hacer referencia a que el liderazgo del equipo será una tarea colaborativa.
«Steve ha sido increíble», dijo Irving. «Él inspira respeto. No se trata del típico entrenador y sus charlas. Nos está dando un espacio cómodo para crecer, para comunicarnos. Tenemos mucha sinergia así que voy a tener que comerme mis palabras de hace unos meses».
Sin meterse en la pólemica de Harden
Por último, también se le preguntó a Irving sobre los rumores de James Harden, que han ocupado las primeras planas durante las últimas semanas. Harden quiere salir de Houston y ha hecho saber que su destino preferido es Brooklyn.
El base esquivó entrar en profundidad en el tema, y se limitó a contestar: «Es una parte de nuestro negocio que no podemos controlar. Será lo que deba ser. James es un gran jugador y le deseamos lo mejor».
Un informe de ayer lunes indicó que Harden todavía tiene la intención de salir de los Rockets a pesar de la llegada de John Wall y DeMarcus Cousins. Pero los de Texas no tienen prisa por cambiarlo con dos años restantes en su contrato.
(Fotografía de portada de Sarah Stier/Getty Images)