Los Warriors responden al reto: habrá ‘Game 7’

Habrá Game 7 también en el Oeste. Los Warriors respondieron al reto y superaron a los Rockets en el sexto partido por un resultado final de 86-115. El tercer cuarto fue clave una vez más, a partir de entonces el partido fue diferente y los de Mike D’Antoni no pudieron aguantar el tirón. Es la primera vez que veremos séptimo partido en las dos conferencias desde el año 1979. Emoción al máximo.

Los Rockets siguieron a la perfección el plan del partido hasta el descanso. Se fueron a los vestuarios con una ventaja de diez puntos. James Harden estuvo fantástico liderando a los suyos en ataque. Metiendo canastas y generando juego para sus compañeros. Terminó con 22 puntos y fue partícipe de otros 19 con sus asistencias. El papel de generador habitual que tan bien hace a su equipo y que tanto necesita su sistema. Eric Gordon empezó muy enchufado y concentrado, anotando los tiros y haciendo justo lo que su equipo necesitaba de él.

Las cosas funcionaban para Houston y no tanto para Golden State: los de Mike D’Antoni firmaron un 11 de 22 desde el triple en la primera parte y los de Steve Kerr se quedaron en un 4 de 18.

Pero entonces pasó lo que ha pasado muchas otras veces. Los Warriors salieron con todo en el tercer cuarto.

El tercer cuarto

13-0. Con este parcial empezó la segunda parte y éste estableció la dinámica que se mantendría durante toda la segunda parte. Golden State entró en este periodo diez puntos abajo y lo terminó siete arriba. No fueron capaces de frenarlos, la tormenta llegó y los Rockets no pudieron hacer nada al respecto. La misma historia que tantas veces se ha visto en el Oracle Arena. Encadenaron buenas defensas con algunos contraataques rápidos y Stephen Curry y Klay Thompson metiendo 6 triples de 8 intentos. El combo contra el que no se puede hacer mucho.

La noche de Klay

Apareció Klay Thompson. Y no es la primera vez que lo hace en un partido en el que su equipo pueda ser eliminado. Terminó la noche con 9 triples, cifra que empata con la segunda mejor marca de la historia de la postemporada.

Os preguntaréis quién es el primero.

Él mismo. También en un sexto partido de Finales de Conferencia. Metió 11 triples en 2016 contra OKC cuando la eliminatoria iba 3-1. Le gusta aparecer en estos momentos.

Stephen Curry mostró un gran nivel también, sobre todo en el segundo tiempo. Firmó 29 puntos, rompiendo el partido en momentos importantes con su lanzamiento y añadiendo ese toque especial al ataque letal de los suyos. Los Splash Brothers en acción.

Draymond Green estuvo genial haciendo, como siempre, un poco de todo. De hecho, su hoja estadística no se ha visto nunca en la historia de los playoffs: firmó +4 puntos, +10 rebotes, +9 asistencias, +4 robos y +5 tapones. Lo dicho: un todoterreno en la pista, fundamental siempre para el éxito de los suyos.

Los Rockets echaron de menos a Chris Paul, sin ninguna duda. Su anotación, su liderazgo en la pista, la posibilidad de tener un generador más en cancha que libere a Harden de responsabilidad…Son los motivos por los que llegó en verano y en estos partidos es clave. Veremos si puede llegar para el séptimo encuentro o tendrán que tratar de sobrevivir sin él.

Habemus Game 7.


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