Solidez. Esa es la palabra que define a unos Bucks que pueden ganar o perder (las menos veces), pero nunca caerse. El triunfo de anoche fue un nuevo ejemplo de ello. No contaban con Giannis Antetokounmpo ni con Khris Middleton; sin embargo, apretaron para imponerse con autoridad a Utah y seguir pisando los talones a Boston en la pelea por la primera plaza de la Conferencia Este.
Sobre el encuentro ante los Jazz, lo cierto es que ejercieron un control casi absoluto. Los visitantes tuvieron un par de momentos buenos, pero desde poco antes del descanso Milwaukee cobró una cómoda ventaja que supieron manejar sin problema alguno; tanto es así que el marcador final reflejó un contundente 123-97.
Con la ausencia de las mencionadas estrellas de los Bucks, el peso del juego recayó sobre Bobby Portis, quien dejó claro una vez más que está listo para lo que le exijan con un doble-doble de 22 puntos y 14 rebotes. «He trabajado mucho y el juego está empezando a ralentizarse para mí. Es divertido ver mi desarrollo y es genial tener compañeros de equipo y entrenadores que confían en mí», comenta el ala-pívot.
La realidad es que Milwaukee realizó un fantástico trabajo colectivo. Portis estuvo bien, pero no quedaron atrás Jrue Holiday con 21 puntos y 8 asistencias, ni Brook Lopez con 18 puntos y 8 rebotes. Sin duda fue una fantástica manera de reponerse de la paliza que recibieron recientemente en Memphis, donde cayeron por 41 puntos.
Hundimiento final de Utah
Los de Salt Lake City estuvieron enganchados al partido durante bastantes minutos, pero todo se vino abajo en un último cuarto que abrieron recibiendo un parcial de 13-0. Ahí concluyo la batalla para lamento de Will Hardy, quien señala que se vieron plenamente superados físicamente.
«Lo que hicimos esta noche no estuvo demasiado bien. Nunca lo haces tan mal como llegas a sentirlo a veces. Su físico nos hizo daño esta noche, más cuando teníamos el balón que cuando lo tenían ellos», analiza el head coach de Utah.
Respecto a las actuaciones individuales, tanto Lauri Markkanen como Malik Beasley concluyeron con 18 puntos. Tampoco estuvo mal Nickeil Alexander-Walker aportando otros 14 tantos desde el banquillo.
(Fotografía de Stacy Revere/Getty Images)