Bledsoe pide salir y los Suns le mandan a casa

Tres partidos han bastado para que estalle la tormenta en Arizona. Phoenix, equipo montando en principio en base a jóvenes talentos con los que cimentar un exitoso futuro, ha optado por hacer borrón y cuenta nueva despidiendo a su entrenador, Earl Watson. La decisión puede gustar más o menos, pero sin duda no ha ayudado a enfriar el ambiente, el cual ha ganado temperatura tras ver a Eric Bledsoe asegurando que no quería estar en Phoenix vía Twitter.

La frase del base formado en Kentucky no ha pasado desapercibida para la dirección del equipo, que a falta de determinar si le imponen una sanción, ha decidido enviarle a casa. Esa es la conclusión a la que han llegado tras reunirse con él antes del último entrenamiento. Phoenix jugará contra Sacramento y Bledsoe lo verá desde casa, informa Chris Haynes de ESPN.

Este problema se veía venir. A sus 27 años, Bledsoe entiende que empieza a desperdiciar sus mejores años con los Suns, no ya porque no se encuentre bien en la disciplina de la franquicia en estos momentos, sino porque la reconstrucción que sigue vigente desde los despachos hace imposible que alcance su objetivo a medio-largo plazo. ¿Cuál es? Ganar, tal y como comentaba ya en el mes de junio.

No le escucharon entonces, de manera indirecta, ni tampoco meses después cuando abiertamente se dirigió a la franquicia para pedir el traspaso. Bledsoe, poco antes de que diese comienzo la temporada, tenía tan claro que deseaba salir como para reunirse con el equipo y poner las cartas boca arriba, informa John Gambadoro de Arizona Sports 98.7. Recibió un ‘no’, pero su determinación no ha cambiado y así lo ha remarcado en Twitter.

Siendo honestos, Phoenix tampoco se ha cerrado en banda conociendo los deseos de su jugador. A mediados de junio se supo del interés de los Knicks, y aunque en esa ocasión no trascendió que se llegase a negociar, sí que ocurriría una semana después con Denver, equipo que habría ofrecido a Emmanuel Mudiay y su elección nº13 por él. No hubo acuerdo de cara al Draft ni tampoco cuando en agosto lo incluyeron en un paquete para hacerse con Kyrie Irving.

¿Frustrado?

Es probable. Bledsoe recién comienza su quinto año en los Suns y en ninguno de los cuatro anteriores ha saboreado las mieles de los playoffs –tampoco apuesten porque pase en éste-. En esa tesitura, el verse cerca de salir varias veces durante el verano tampoco ayuda a que su situación anímica haya mejorado. Y por si faltase algo, tiene contrato hasta 2019. Ya está en manos de los Suns el buscar algún acuerdo ahora o apurar hasta el próximo verano. Mientras, Bledsoe no parece querer esperar.

¿Traspaso inminente?

Parece lo más lógico. Bledsoe y los Suns han superado sin duda el punto de no retorno, por lo que una negociación para verle salir debería darse más pronto que tarde. El que la situación se alargue en el tiempo dependerá de hasta qué punto estén dispuestos en Phoenix en aceptar menos del valor real de su jugador. Como ya hemos visto anteriormente -Paul George- tener que traspasar a un jugador cuya decisión de salir es de conocimiento público, no es tarea sencilla.


EXTRA NBAMANIACS

Nuestro trabajo en nbamaniacs es apoyado por lectores como tú. Conviértete en suscriptor para acceder a beneficios exclusivos: artículos especiales, newsletter, podcast, toda la web sin publicidad y una COMUNIDAD exclusiva en Discord para redactores y suscriptores.