Queda claro que Gregg Popovich tiene toda la intención de dejar un denso y profundo legado en San Antonio para cuando llegue el día en que éste los abandone para centrarse exclusivamente, bien en la selección nacional, bien en el merecido y dolce far niente.
‘No’ a la reconstrucción
Por ello, tanto él como R.C. Buford, su general manager, se plantan impertérritos ante lo que parece el fin insorteable de una Era. Kawhi Leonard era el eslabón perfecto y llovido del cielo (o de las profundidades del Draft) para un tránsito suave entre su Big Three de casi dos décadas (Duncan, Parker, Ginóbili) y el difícil después.
En ningún mapa tejano aparecía una bifurcación ante la que Leonard activara el intermitente. Pero si eso es lo que tiene que suceder, los Spurs están decididos, no solo a no quedarse con las manos vacías, sino a que se les resbalen los activos obtenidos a cambio. Reconstrucción, sí, pero a ritmo qatarí.
A Los Ángeles Lakers ya sabemos más o menos lo que exigieron a cambio del dos veces Jugador Defensivo del Año. Unas tres cuartas partes de su futuro: Ingram, Kuzma, Hart… lo querían todo.
Los angelinos, parece, han decidido negarse ante tamañas exigencias. Saben que Leonard desea jugar en Hollywood, y están dispuestos a esperar un año y conformarse con LeBron, para lanzarse con todo el verano que viene, cuando sea agente libre.
Philly, posible simbiosis
Así pues, los Spurs recalibran mirilla en su otro gran target. Aquel que tiene todo aquello que ansían: jugadores jóvenes y válidos, y rondas del Draft. Los Philadelphia 76ers, de inicio, estarían tremendamente receptivos porque entienden que un alero de primer nivel es lo único que les falta para dar por concluido, en estrictos términos de plantilla, The Process.
Y llegamos al punto de no retorno. Ése en el que los tejanos hacen sus cálculos en la Trade Machine de ESPN, y nunca les sale a devolver.
No importa que a Kawhi le quede tan solo un año de contrato. No importa que esté a disgusto con la franquicia. No importa que haya declarado su deseo de jugar en L.A. No importa que lleve casi un año entero fuera de las pistas y una extraña lesión entreteja su estado físico de mil y una dudas. No importa porque lo que los Spurs piden a cambio de su jugador, es un paquete digno de aspirante a MVP. Justo lo que era Leonard… hace ocho meses.
Según Keith Pompey, de Philly.com, los 76ers estarían decididos a mandar a San Antonio, a cambio de un solo año de Kawhi, a dos de sus titulares (Dario Saric y Robert Covington) y la primera ronda no protegida del Draft 2021 (procedente de Miami). Un precio más que razonable por un jugador cuya continuidad no está asegurada.
El desorbitado pack
Porque esto es precisamente lo que frena a los 76ers a dar más. La ausencia total de certeza de que tras una temporada, el forward quiera mantenerse en sus filas. Una temporada no es, ni mucho menos, suficiente para hipotecar gran parte de sus opciones de los próximos años.
«Si llega la situación adecuada en la que podamos adquirir a alguien que realmente pueda agregar valor a nuestro proyecto y el costo no sea prohibitivo, entonces daremos el paso y lo haremos», ha expresado el directivo de Sixers, Josh Harris. «Pero si eso no surge por alguna razón, seguiremos avanzando con nuestro proyecto actual».
«Y el costo no sea prohibitivo»… algo así como, según señalan fuentes de este mismo medio, lo que se estaría demandando desde San Antonio. Porque el monto sería el siguiente: a lo ya dicho, es decir, Saric, Covington y una primera ronda del Draft, habría que añadir dos primeras rondas más.
Dos primeras rondas que paralizan y difuminan todo atisbo de apretón de manos entre franquicias. Un paquete descabellado.
No a cualquier precio
Los 76ers, además, ya se han cubierto las espaldas en el puesto de ‘3’, añadiendo fondo de armario con los fichajes de Wilson Chandler y el juego abierto de Nemanja Bjelica.
Si Leonard es una opción real los 76ers están harto receptivos a ella. Fultz, Reddick, Leonard, Simmons y Embiid no suena mal para empezar. Es un quinteto que seduce a Philly. Pero no a cualquier precio.