Kevin Durant equilibra la serie con un final perfecto

Los inconsistentes finales de Oklahoma City durante toda la temporada han sido motivo de preocupación, y su victoria en el segundo partido en San Antonio de las semifinales del Oeste fueron más comentadas por los fallos arbitrales que por la buena labor de los Thunder. El equipo de Billy Donovan necesitaba una muestra contundente de su fortaleza para ganar partidos igualados con la presión de jugarse la temporada. Y Kevin Durant la ofreció a lo grande.

El auténtico MVP del partido

17 puntos (de 41 totales) sin fallar un solo tiro de campo, 2 asistencias, 1 rebote y 1 robo para forzar un parcial de 34-16 en el último cuarto ante el que quizás sea el equipo más sólido del planeta. Con tanto en juego, incluida la posibilidad de estar jugando su último partido como local en Oklahoma City, Kevin Durant reivindicó a lo grande su estatus de superestrella. Su actuación había sido notable hasta entonces, aunque insuficiente para descolgar a San Antonio. Pero, al final, los Spurs tuvieron que claudicar para un 111-97 que iguala la eliminatoria a 2 victorias.

RELACIONADO: El método de San Antonio venció a la anarquía

De forma excepcional, Spurs y Thunder intercambiaron sus estilos en este Game 4. Russell Westbrook, más colaborativo que en otros partidos, acabó con más asistencias (15) que San Antonio al completo (12). Los hombres de Gregg Popovich buscaron más las jugadas individuales de Tony Parker (22 puntos) y Kawhi Leonard (21 puntos) en perjuicio de una mayor circulación de balón, encontrando menos que en otros partidos a LaMarcus Aldridge (20 puntos, con un 8/18 en tiros de campo). Esta falta de pase también afectó a su tiro exterior (2/12 en triples) y, a la larga, hizo más previsible su ataque para beneficio de Oklahoma City.

Mención especial queda la irrelevancia en la que cayó Tim Duncan, reducido a un mero reboteador para molestar lo máximo posible a Steven Adams, 18 años más joven que él y de momento mucho más eficaz en la pintura. El dos veces MVP y cinco veces campeón se quedó sin intentar al menos un tiro de campo por primera vez en su larga y exitosa carrera NBA. Al final, en sus 12 minutos de juego, Duncan acabaría con más faltas personales (4) que puntos (0) o rebotes (3).

La rabia contra la máquina

El 0/7 combinado de Leonard y Aldridge en el último cuarto contrastó de forma punzante con el 6/6 de un especialmente agresivo Kevin Durant. El partido se acabó decidiendo en estos minutos de casi inédita fragilidad de los Spurs y de dominio absoluto del MVP en 2014. Si esta derrota fue un simple fallo técnico temporal de la máquina de baloncesto de los Spurs o si Oklahoma City es capaz de conseguir dañarla de forma irreversible se verá en los próximos partidos, con el quinto duelo disputándose el martes. En este último supuesto, el virus muy seguramente tendrá un nombre: Kevin Durant.


EXTRA NBAMANIACS

Nuestro trabajo en nbamaniacs es apoyado por lectores como tú. Conviértete en suscriptor para acceder a beneficios exclusivos: artículos especiales, newsletter, podcast, toda la web sin publicidad y una COMUNIDAD exclusiva en Discord para redactores y suscriptores.