Cumplido el primer cuarto del calendario en esta regular season, varias franquicias han comenzado ya a posicionarse en el mercado. Algunas, para reforzar su candidatura al título. Otras, buscando un cambio de efecto que les ayude a superar un bache o seguir creciendo. En el caso de los New Orleans Pelicans, los malos resultados obtenidos han disparado el interruptor de alarma.
El equipo dirigido por Stan Van Gundy ha perdido siete de sus últimos diez partidos y ocupa la penúltima posición de la Conferencia Oeste, tan solo por delante de Minnesota Timberwolves. Las recientes declaraciones del general manager David Griffin abrían las puertas a la necesidad de hacer cambios aunque no de manera urgente. Los últimos rumores, sin embargo, señalan a que puede producirse alguna operación más pronto que tarde.
En apenas un lapso de tres días, los medios The Athletic y ESPN señalaban directamente a Lonzo Ball, Eric Bledsoe y J.J. Redick como potenciales candidatos a ser traspasados. El periodista Shams Charania adelantaba incluso que los Golden State Warriors estarían negociando un acuerdo a cambio de Kelly Oubre Jr.
Ahora, es a Redick, a sus 36 años y en calidad de expiring, al que se le han presentado varias novias. Según el mismo periodista, los Celtics, los Nets y los 76ers se han erigido como sus potenciales destinos. El escolta habría trasladado a la directiva de New Orleans su deseo de regresar al noroeste del país, ya que su familia reside en el área de Brooklyn.
Un tirador experimentado y efectivo como Redick sería una incorporación muy valiosa para estos tres contenders. Ahora bien, estas franquicias tendrán que rascarse el bolsillo para hacer frente a los 13 millones de salario que le corresponde al jugador hasta final de campaña y cuadrar las cuentas.
En su dilatada carrera de 15 temporadas en la NBA, el de Cookeville ha promediado más de 13 puntos en un total de 912 partidos con un acierto en triples del 41,4%.
(Fotografía de portada de Christian Petersen/Getty Images)