Mientras se resuelven los casos de Kristaps Porzingis y Carmelo Anthony, peliagudos ambos, los New York Knicks tienen otra incógnita por despejar. Quién será su base titular el año que viene. Bien podría ser exactamente el mismo que el del año pasado.
Con el nombre Derrick Rose sonando en puntos distintos de los Estados Unidos (Minneapolis, San Antonio), el base siempre se ha mostrado dispuesto a no moverse de donde está si se da el clima adecuado. Por su parte, los Knicks jugaban a esperar; a ver que pelotas podía lanzarle el mercado. Tal como están las cosas en este momento, volver a sentarse con Rose y ofrecerle un contrato, es una opción que gana fuerza, según fuentes de Ian Begley, de ESPN.
En el Madison han hecho ya su apuesta para el futuro: el playmaker francés de 19 años, Frank Ntilikina. Necesitan una para el presente. Rose, a sus 28 años, ha terminado la temporada con una seria lesión de menisco, pero tras cuajar un año notable, sin problemas físicos serios excepto este último.
Un mentor… ¿a qué precio?
18 puntos, 4,4 asistencias y 3,8 rebotes son un bagaje que invita a pensar que, si Rose vuelve satisfactoriamente de su lesión, podría ser un buen mentor para Ntilikina, a quién sería precipitado darle tan pronto las riendas de la titularidad.
Ahora, el tira y afloja estaría en el contrato: en su cifra y en su duración. Mientras Rose querría un acuerdo a largo plazo, los Knicks no querrían arriesgarse a hipotecarse 4-5 años por un jugador cuyas rodillas son una sempiterna incógnita. En cuanto a la cifra, los últimos rumores han señalado que el ex MVP no exigiría ya un acuerdo por el máximo, pero habrá que ver hasta cuánto y dónde estará dispuesto a ceder.