Ojo cocina, que la mente de Ainge maquina. Venimos de disfutar con unos Boston Celtics que han alcanzado las Finales de Conferencia y haber terminado unas semanas antes como líderes del Este en temporada regular… y Danny Ainge, sin embargo, avisa: «Hay potencial para que haya cambios significativos».
Esta misma tarde hemos publicado la buena disposición de Isaiah Thomas a aplazar su renovación, con tal de mejorar la flexibilidad salarial de su equipo a la hora de acometer fichajes importantes en verano. Y ahora, su general manager se destapa con estas declaraciones; no hay que ser ningún genio para intuir que ha habido reunión interna con su consecuente intercambio de ideas.
«Quizás haya pocos cambios, quizás muchos. Quizás no los haya. Todo dependerá de lo que logremos en el Draft y los acuerdos que apalabremos antes de la agencia libre, y luego ver que ocurre propiamente en la agencia libre. Hay muchos interrogantes por ahora… se nos viene un tiempo intrigante y de mucho trabajo», ha adelantado Ainge al Boston Herald.
La opinión de Pierce
Wyc Grousbeck, propietario del equipo, advertía que en Boston tenían la intención de quedarse con el first pick después de que les sonriera la suerte la noche del sorteo del Draft. Paul Pierce, leyenda viva, recién retirado, y con su camiseta en breves colgando del cielo del TD Garden, ha querido pronunciarse.
«Debes traspasarlo porque él [Markelle Fultz] no puede ayudar a los Celtics a alcanzar la cima. Y el momento es ahora. Eres un equipo de 50 victorias. Tienes que aprovechar el momento. Si puedes adquirir a Paul George, Jimmy Butler, o Gordon Hayward, tienes que hacerlo», ha dicho The Truth, pensando obviamente en la barrida que les acaban de infligir los Cavs en las Finales de Conferencia.
Entonces, ¿cuál es el plan?
Y ahora, este pequeño análisis de Ainge. «Sólo porque estés a una pieza de distancia, no significa que puedas conseguirlo. Y si te obligas a conseguirlo, si fuerzas un acuerdo o te obligas a conseguir al segundo, al tercero o al cuarto mejor jugador disponible en esa posición que necesitas, no significa que te conviertas automáticamente en tan buen equipo como necesitas, y entonces estás atrapado».
Pensamientos ladinos, no del todo transparentes, y que por momentos parecen enfrentarse. «Tenemos buenos jugadores, pero necesitamos algunos todavía mejores», termina Ainge.
¿Qué quiere transmitir el GM? Están o no están dispuestos a lanzarse de cabeza a por ese crack? ¿A por ese George, ese Butler, ese Hayward… ese Griffin? En Boston llevan años haciendo los deberes y encaran la agencia libre con sólo 61,7 millones de dólares comprometidos. Margen de sobra hasta el tope salarial proyectado en 101 millones para la 2017/18.
Fultz: sí o no
Hayward y Griffin están en disposición de salirse de sus contratos este mismo verano, por lo que no habría necesidad de dar nada a cambio más allá del cuantioso contrato que estos exigieran. De querer empecinarse en George —destinado a Lakers— o Butler, además del bolsillo deberían rascarse en rondas y activos. Y no hace falta que digamos qué ronda van a «pedir» estas franquicias.
Y luego tocaría hablar de los que están en ciernes de convertirse en agentes libres: Amir Johnson, Jonas Jerebko, Kelly Olynyk y Gerald Green. En Boston deberán decidir si apuestan o no por retenerlos. Lo dicho, a pesar del temporadón, verano de lo más movido el que se avecina en Massachusetts.